Actualmente, hay muchas personas que quieren volverse empresarios y emprender en el mundo de los negocios creando su propia empresa. Pero a la hora de plantearse surgen muchas dudas. ¿Qué necesito para ser un emprendedor? Sobre todo, para ser un buen emprendedor y conseguir que nuestro negocio prospere y nos dé muchos beneficios.
Cuando se inicia en este mundo es muy fácil encontrarse dificultades, dudas e incluso no llegar a conseguir nuestros objetivos iniciales.
Tenemos que tener en cuenta que a día de hoy existen muchísimos modelos de negocio y por ello, las cualidades y conocimientos son distintos para el tipo de empresa que quieras montar.
El empresario no nace siendo empresario, aunque algunos tengan cualidades que les ayuden, también se puede formar a un empresario. Al final es necesario una mezcla de los dos.
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Habilidades de un emprendedor
Nos referimos a cualidades, a aquellas aptitudes que posee una persona. Aunque no es necesario tener todas las cualidades que os vamos a comentar, si que es bueno tenerlas o aprenderlas ya que nos facilitarán nuestro trabajo.
- Creer en el proyecto y en nosotros: Si el empresario está ilusionado con el proyecto que quiere poner en marcha y cree en su propia idea, le ayudará a la hora de poner en práctica su propuesta. Es necesario que el emprendedor crea también en sí mismo, ya que tener una mentalidad positiva en su negocio, el ser constante o sacrificarse por su idea, podrá lograr el éxito.
- Asumir riesgos y afrontarlo: si de algo se caracterizan los emprendimientos es que conllevan muchos riesgos. El empresario tiene que tener la capacidad de analizar su proyecto y el entorno para conocer todas las variables posibles. Si logramos esto, seremos capaces de reducir la incertidumbre y el riesgo que nos genera nuestro negocio.
- Capacidad de organizar y dirigir:Tenemos que saber, o aprender, a organizarnos bien en el trabajo. Pero no solamente a nosotros mismos, sino a todo el equipo que trabaja con nosotros y delegar funciones.
Tenemos que aprender a dirigir bien, sabiendo comunicarnos con nuestros empleados. Es de vital importancia que sepamos transmitir bien nuestros mensajes para no crear confusiones entre nuestros trabajadores o terceras personas.
- Capacidad creativa, innovadora y emprendedora: debido a la situación de los mercados y a la alta competitividad, es necesario que un emprendedor tenga una capacidad creativa para lograr diferenciarse. Tenemos que tener también una capacidad innovadora, pues la sociedad avanza a un ritmo rápido y tenemos que saber adaptarnos.
- Capacidad de liderar y motivar: es necesario que el emprendedor sea capaz de liderar a su equipo de trabajo para poder llevar adelante su empresa. Para ello, es necesario crear un sentimiento de pertenencia y que los trabajadores se sientan a gusto en el espacio laboral. Es necesario que haya unión de grupo ya que ayudará a superar los momentos difíciles de la empresa y sobre todo, a luchar contra la competencia.
Conocimientos y formación para emprendedores
No todo lo que forma a un buen empresario son cualidades, innatas o no. Es necesario que el emprendedor esté formado para poder poner en marcha su idea de negocio. Hay que tener en cuenta que va a manejar aspectos como financieros, humanos, productivos, legales, entre otros.
- Experiencia: si el emprendedor cuenta con experiencia anterior del sector donde se va a introducir, esto le supondrá una ventaja a la hora de poner en marcha su negocio. Es necesario que conozca la materia prima con la que va a trabajar o las maquinarias que va a utilizar para transformar su producto.
Si el empresario no tuviera la experiencia necesaria, se puede adquirir esta formación a través de socios o contratando servicios externos.
- Experiencias ajenas al emprendedor: conocer experiencias que hayan llevado a cabo otras personas, ya sea de nuestra región o de otra, nos puede aportar buenas ideas.
Nos sirve también para conocer nuestro entorno y saber a lo que nos enfrentamos, evitando los fallos que ellos cometieron
- Formación: es necesario que la persona que se vaya a decantar por montar un negocio tenga una formación en dirigir y gestionar una empresa. Esta formación la podemos obtener por ejemplo, gracias al grado universitario Administración y Dirección de Empresas. Aun así, el tener dichos conocimientos no asegura que la idea vaya a ser un éxito.