Si estás pensando en montar tu propio negocio y has estado buscando información sobre cómo hacerlo, seguro que has leído sobre la conocida licencia de apertura. Pues bien, puede que tu actividad esté exenta de la licencia de apertura y ¡aún no lo sabes! Si quieres saber más, sigue leyendo.
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¿Cuáles son las actividades inocuas?
Llamamos actividades inocuas aquellas que no necesitan de licencia de apertura para su actividad pues, se sobreentiende que no van a producir molestias o ruidos, que no van a causar ningún daño material, medioambiental o a la salud.
Por tanto, dentro de este grupo se clasifican las peluquerías, los comercios minoristas de moda y artículos de belleza, fruterías, pescaderías, carnicerías, panaderías, la venta de instrumentos de música, artículos para el hogar, reparación, etc. A su vez, dentro de esta lista también podemos encontrar oficinas como las agencias de viajes o las inmobiliarias.
Si tu propósito es comenzar alguna de las actividades anteriormente citadas y el establecimiento tiene una superficie menor a 300 metros cuadrados, sólo con presentar una declaración responsable bastaría.
¿Qué es la declaración responsable?
Entendemos por declaración responsable aquél documento en el cual, la persona que va a desarrollar la actividad, afirma que va a cumplir con todos los requisitos legales para ello. También recibe el nombre de licencia exprés y se trataría de una comunicación de apertura a tu ayuntamiento correspondiente.
Recuerda que no siempre podrás acogerte a este trámite.
¿Cuándo necesitas la licencia de actividad?
Los negocios que sí deben solicitar la licencia de apertura se les denominan actividades clasificadas pues, se considera, que su actividad puede conllevar algún peligro o que pueden causar algún tipo de daño o molestia. En este grupo clasificamos al ocio nocturno, la hostelería o a las actividades industriales, por ejemplo, las fábricas. Si tu actividad se encuentra dentro de este grupo, necesitarás información sobre cómo obtener tu licencia de apertura.
¿Cómo saber si un local tiene licencia de apertura?
Para saber si el local en el que estás interesado/a tiene licencia de apertura, puedes consultarlo en el ayuntamiento de tu municipio. En caso de que en el local ya se realizara anteriormente la actividad que quieres desarrollar y solo va a sufrir un cambio en la titularidad, lo más probable es que no tengas que volver a solicitar una nueva licencia de apertura.
¿Cuánto tiempo se tarda en conceder la licencia de apertura?
Aunque el tiempo que tardan en conceder la licencia de apertura depende en gran parte de tu ayuntamiento, por norma general, el tiempo mínimo de espera suele ser de un mes y, en ocasiones, en función del municipio, puede alargarse hasta casi un año.
Pero, ¡espera! Si tu actividad se encuentra dentro del grupo de actividades consideradas como inocuas y estás seguro de que cumples con todos los requisitos, podrás presentar tu declaración responsable mientras esperas a recibir la licencia. No obstante, ten presente que la declaración responsable no te librará de la sanción en caso de inspección y de no cumplir con los requisitos pertinentes.
Por otro lado, lo bueno de las licencias de apertura es que una vez que te la conceden y la recibes, no tendrás que renovarla a no ser que cambies de local o actividad. En cuanto al precio de las licencia de aperturas, este variará en función de las tasas de cada ayuntamiento, hasta el punto de que en algunos municipios su coste es cero mientras que en otros, pueden alcanzar los 500 euros.
¿De cuánto es la multa por no tener la licencia de apertura?
En caso de que la infracción sea leve, la multa oscila entre los 300 y 30.000 euros, además de que se deberá suspender la actividad y se procederá al cierre del local.
Por el contrario, si la infracción es grave, la sanción puede ir desde los seiscientos mil euros hasta los tres millones de euros en caso de infracción muy grave.
¿Es lo mismo licencia de actividad y licencia de apertura?
La respuesta es sí, la licencia de actividad y la licencia de apertura son lo mismo. Puede recibir un nombre u otro en función de la administración, pero ambos términos hacen referencia al permiso para poder desarrollar una actividad en un determinado establecimiento.